Celos. ¿Qué son los celos para vosotros?

Frustración, esto lo puedo identificar con celos. Celos, envidia, este es uno de los venenos, y ¿sabes por qué? Porque juzgamos sin saber. Por ejemplo, en nuestra sociedad, creemos que acumular riqueza material nos traerá felicidad. Entonces, cuando vemos multimillonarios, vemos su estilo de vida, nos ponemos celosos y, ese es el propósito cuando muestras el coche deportivo, la casa, el estilo de vida, todo el propósito es poner celosos a los demás. Es nuestra cultura, para impulsar mi ego, voy a mostrar lo que tengo, y eso supuestamente me hará feliz. Pero la verdad es que te hace sentir miserable porque está completamente vacío. No tiene sentido. Pero, por supuesto, debido a nuestra ignorancia, juzgamos y creemos que la otra persona es feliz. Creemos que eso es lo que queremos y que es lo que necesitamos para ser felices. Porque en la sociedad capitalista, hemos sido educados de esa manera para comparar, comparar y pensar: “¿Por qué no tengo eso? Debería tener eso. Son felices. No lo soy. Quiero ser feliz”, y entonces vienen los celos. Y luego te envenenas, te haces miserable. Pero la verdad es que la otra persona es mucho más miserable que tú porque la riqueza material nunca hará feliz a alguien. Es solo insatisfacción todo el tiempo: cuanto más tienes, más quieres; cuanto más tienes, más preocupaciones, más problemas, más desconfianza. Desconfías de las personas porque no sabes cuál es su intención. Cuando tienes mucha riqueza material, es difícil. No sabes cuál es su intención, todos quieren una parte de tu riqueza. Entonces, con los celos, solo nos enfocamos en esta pequeñísima perspectiva. No nos damos cuenta de todos los demás aspectos del sufrimiento que la otra persona puede tener. Entonces, en el momento en que cambias los celos a la compasión, transformas este veneno y se convierte en algo positivo.

Y sí, posesión, posesividad, frustración, el deseo de tener. OK, entonces, la frustración, nos sentimos frustrados por los celos, como describí antes, porque juzgamos sin entender. Así es como nos frustramos, como yo no tengo suficiente, no tengo la situación correcta, debería tener más, merezco más, por qué no tengo esto, por qué, por qué, bla bla, bla … Al final, te vuelves miserable y no puedes apreciar el regalo de la vida, tan precioso momento a momento. En el momento en que puedes apreciar lo que tienes aquí y ahora, tienes compasión y la intención de ayudar, entonces esa es la verdadera felicidad, esa es la verdadera felicidad, realmente no necesitas nada más. El cuerpo necesita comida, por supuesto, y buena compañía y calor por la noche y refugio y bla, bla, se vuelve cada vez más complicado, pero lo básico es tener una mente feliz, y todo lo demás vendrá después porque el cuerpo sigue a la mente. Si tienes una mente feliz, entonces tu cuerpo será feliz también porque tu mente influye en el cuerpo. Si estás deprimido, tu cuerpo se deprime, todas tus células se deprimen.

Por lo tanto, es bueno bailar a veces, es bueno escuchar música a veces, es bueno comer buena comida, comida sana, hacer ejercicio, tener pensamientos positivos, la intención de ayudar, y todo esto le traerá lo que llamamos “felicidad”. Pero en realidad no existe la felicidad, es solo un concepto. Si fuera real, que lo es, pero lo es a otro nivel, sería un estado mental, un estado mental constante. Algunas personas lo llaman liberación del samsara o nirvana. Entonces, en el momento en que tienes estos pequeños detalles, creas la causa para no ser infeliz. Y eso, por ahora, es más que suficiente. Si no eres infeliz, lo estás haciendo bien. Porque la felicidad que buscamos es muy temporal. Podemos estar aferrandonos, aferrandonos, aferrandonos a algo que nunca puedes atrapar. Entonces, realmente no tiene sentido, “Quiero ser feliz, quiero ser feliz”, pero ni siquiera sabes qué es eso. Tienes un concepto, pero una vez que decimos: “oh, tal vez, cuando consiga este coche o cuando tenga a esta hermosa novia, cuando tenga una casa bonita y una familia y esto y aquello, o cuando tenga un buen trabajo que pague bien “, todos estos conceptos; “Cuando tenga una realización o tenga la oportunidad de meditar, practicar Dharma, entonces seré feliz”, ese es el concepto, pero cuando sucede, el concepto cambia y tenemos otro concepto.

Tengo una amiga que estudiaba en el Programa de Maestros en Lama Tsongkhapa y le pregunté: “¿Haces meditación?” Ella dijo: “No, ahora estoy estudiando, cuando tenga una cueva, meditaré”. Es un poco así, ¿no? Creamos ese concepto: cuando tengo la cueva, las condiciones perfectas, entonces ya practicaré, pero las condiciones perfectas son siempre ahora y aquí y en ningún otro lado. Un concepto es un concepto. Es como un pensamiento que viene y se va. Como las nubes, vas a agarrarlas pero no puedes tocarlas, no puedes agarrarlo. Parece real, pero está vacío. Entonces es por eso que nos frustramos en base a nuestra ignorancia, en base a la comparación, en base al ego que no existe, y las posesiones, todo esto trae sufrimiento, así que debemos ser capaces de cambiarlo. Observa tu mente, observa cómo funciona la mente, el mecanismo, el condicionamiento, el patrón. Incluso si no puedes pensar en las vidas pasadas, al menos piensa en esta vida. No es fácil cambiar de un momento a otro, pero cuando sucede, si somos conscientes, crea la condición para cambiar lentamente, creamos las condiciones para que ocurra el cambio. No podemos cambiarnos a nosotros mismos, pero podemos crear las condiciones para que ocurra ese cambio.

Olvidé mencionar algo al principio. Todo lo que quería decir era que no tengo nada que enseñar. Todo lo que puedo hacer es recordar a la gente lo que ya sabemos. Solo quería aclarar esa parte: no soy un maestro, solo soy un amigo que te ayuda a recordarte. Yo también necesito muchos recordatorios, así que nos ayudamos mutuamente. Y como dicen, el verdadero amigo es el que te critica frente a ti, la crítica constructiva y a tus espaldas, habla muy bien de ti. Eso es un verdadero amigo.

Entonces, estábamos terminando con los celos, pero recordé que hay un aspecto muy importante acerca de los celos – el aspecto de celos novio-novia, novia-novio, el aferramiento, los celos de ira. Sucede todo el tiempo, ¿verdad? Primero amas a alguien, y obviamente no es realmente amor, es apego. ¿Por qué digo que no es amor verdadero? Hay dos razones: una, trae sufrimiento al final; y número dos, puedes odiar tanto como puedes amar. Entonces, dices: “Oh, te amo, te amo”, y al día siguiente, “te odio, te odio”. Es por eso que ese tipo de amor no es el verdadero amor, es un apego temporal. Lo que ocurre realmente es que nos apegamos al sentimiento que la otra persona nos hace sentir. No estamos apegados a la persona. Estamos apegados al sentimiento que él nos da, o mejor dicho, el sentimiento que surge dentro de nosotros basado en la presencia de la otra persona, en nuestra proyección. A veces nos idealizamos, y cuando esto ocurre, después es como abofetearnos a nosotros mismos. Por eso, ya sabes, debemos ser capaces de diferenciar. Los celos no provienen del verdadero amor, del amor, sino del concepto equivocado del amor porque si es amor verdadero e incondicional, si la otra persona es feliz, tú serías feliz, ¿verdad? Y si el otro va con alguien más, “¡Oh, me alegro! Estoy tan feliz, ¡estás más feliz con ellos, genial!”

Creo que hay muy pocas personas que puedan reaccionar así. Tengo un amigo que es así – una pareja, han estado juntos ahora, tal vez doce años o más, trece. Mientras estuvieron juntos, la chica tuvo cuatro relaciones, una de tres meses, otra de cuatro meses, otros ocho meses, y así. Entonces, dentro de la relación, ella tenía otras relaciones. Él está súper feliz todo el tiempo – il s’en fout- no le importa. Eso para mí fue ¡guau! ¿Cómo es eso posible? Pero él dijo: “Oh, no, está bien, no importa. Si ella está feliz, yo estoy feliz, está bien”. No creo que sea lo correcto, es muy, muy arriesgado, muy, muy arriesgado. Puede crear muchos problemas, muchos conflictos y los celos pueden surgir muy fácilmente, pero en este caso, que es muy raro, lo he visto. Y de hecho, ahora tienen un hijo y una hija, muy amigos míos, y ahora están muy, muy felices. Ese tipo es mi héroe, muy cercano, siempre le pregunto, “¿Cómo lo haces?” Él dice: “No sé. Así es como soy”. No le importa, simplemente desapego. Se enfoca en la felicidad de la otra persona. No es posesividad, no es “Quiero ser feliz”. Es el deseo de la felicidad para el otro lo que puedes amar. Mi propia felicidad, quiero poseerla para mi propia felicidad, ese no es el verdadero amor. Y cuando dices: “Oh, te amo, te amo”, todos los días, de diez a quince veces al día, pero luego, en un segundo, sucede algo y sale la ira y luego dices: “Oh, lo siento, lo siento y ¡sabes que te amo! ¡te amo! ” y al día siguiente, “¡Te odio!” Pero es cierto que el odio y el amor están bastante unidos. Según entiendo, lo opuesto al amor es la indiferencia, no el odio, pero esa es otra historia. Así que eso era parte del tema de los celos. Creo que es la parte importante para comentar, solo para ser claros, para estar al tanto de eso.