Karma, ¿sabeis lo que es el karma? Es la ley de causa y efecto. Entonces, lo que das, lo recibes. El karma es como una huella que creas en tu flujo mental, que llevas de una vida a otra. Puede ser muy sutil. Existen diferentes tipos de karma, pero el concepto principal del karma es como una ley de la física, conectada con nuestro yo, nuestro ser. Es una huella que se queda con nosotros y nos sigue. Y de acuerdo con cómo actuamos y lo que hacemos a través del cuerpo, el habla y la mente, entonces creamos la causa para que las vidas futuras o incluso esta vida recibamos algo. A veces, muchas veces se multiplica, las cosas buenas y las cosas malas. Eso es la teoría al menos. Estoy seguro de que podemos ver cómo nos relacionamos con ello.
Bien, entonces el ego y la mente egoísta son muy similares, ¿verdad? La mente egoísta trae mucho sufrimiento, lo cual no es muy bueno, porque a través del sufrimiento simplemente nos dañamos a nosotros mismos y más especialmente cuando no lo vemos. Pero en el momento en que comenzamos a ver el patrón de nuestra mente, de cómo a través de la mente egoísta creamos más sufrimiento, entonces realmente podemos comenzar a evolucionar. Realmente podemos comenzar a trabajar en ello y usarlo para comenzar a cambiar el patrón y el hábito que de alguna manera la sociedad nos ha influenciado.
Por eso le llaman el perfecto renacimiento humano porque tenemos la capacidad de practicar Dharma, ayudar a otras personas, comprender nuestro potencial y también porque lo que sufrimos nos hace más, en español decimos … más conscientes, despiertos. Si no sufriéramos, seríamos como los dioses. No tendríamos ese deseo de mejorar o crear la causa para seguir evolucionando.
O sea que, en el karma evolucionas, o involucionas. Cuanto más acciones positivas haces, más creas el hábito de hacer cosas más positivas, por lo que es más fácil hacerlas y disfrutas haciéndolas y te lo pasas bien al hacerlas. Y tal vez cuando renazcas, renacerás en situaciones en las que es mucho más fácil y rápido seguir evolucionando. Y cuando involucionas es lo mismo pero al revés.
Tal vez renazcas como un tigre que debe matar y hacer sufrir a otros animales para sobrevivir. O tal vez renazcas en un vecindario muy violento donde para sobrevivir debes formar parte de una pandilla. Y para ser parte de una pandilla debes demostrar que vales la pena, así que debes matar a otro ser humano. Si no, morirás o te matarán. Entonces, debes sobrevivir. Y esa es la situación en la que terminas.
Y a veces por ignorancia, por falta de comprensión, falta de información, es muy difícil salir de esas situaciones. Tal vez nazcas en una familia de carniceros que se pasan matando toda su vida y tú también tienes ser carnicero y matar animales. Y no tienes la capacidad de entender que eso es malo aunque cuando lo estás haciendo, tal vez no te sientas bien.
Pero a medida que involucionas, algunas personas disfrutan dañando a otros seres sintientes. Ellos lo disfrutan. Eso es aún más involucionador, por lo que estás creando el hábito; cada vez será más fácil hacerlo. Es muy peligroso porque es muy fácil ir de hacia un lado o hacia el otro.
Así que ahora mismo, podemos evolucionar, seguir adelante, ¿sabes? Y eso es algo por lo que estar realmente agradecido, tener esta oportunidad. Y en este mismo planeta hay seres humanos en muchos lugares donde no pueden sentarse y pensar en eso.
En China, por ejemplo, en algunos puestos de trabajo tienen redes anti suicidas. Por ejemplo, personas en Estados Unidos, soldados que sirvieron en Afganistán, veteranos, creo que hay una estimación de un promedio de veinticinco veteranos que sirvieron en Afganistán e Irak que se suicidan por día. Por día, veinticinco se suicidan por día. De media. No es nada fácil para muchas personas. Es muy difícil. Ahí es donde creo que entra la compasión y me doy cuenta de que somos muy afortunados.
De todos modos, no quiero deprimiros; debemos ser felices; es importante, pero al menos estar al tanto de las oportunidades que tenemos. Porque a veces la mente egoísta comienza a decir: “Oh, pobre de mí. Mírame, oh ”, y comenzamos a ponernos tristes, comenzamos a limitarnos a nosotros mismos. Y eso es un gran error porque somos hermosos, y tenemos un potencial increíble y lo sabéis. Pero a veces, no tratamos de avanzar porque de alguna manera tememos nuestro potencial, así que nos limitamos a nosotros mismos. Y eso es muy peligroso. Creo que la mayoría de nosotros hacemos eso; La mayoría de nosotros nos limitamos.
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